27-1-23 Pero diría que es día 1

 Dada la cierta tendencia autobiográfica de este blog y por representar esa función hoy creo que es un día muy importante para mi.

Ya está hecho el MIR, hace 5 días, y estos han sido de movimiento y de conectar el mundo de las ideas con la realidad. Pero esta mañana me levanté sin plan, sin nada que hacer más que limpiar la casa. Increíble la sensación de que está todo bien,,, sano, poder tener dinero para cosas que luego serán básicas (poder darte un rato en la ducha, poner calefacción de día por hacer fuera 3º, permitirte hasta soñar con comprar las herramientas y juguetes que me gustaría tener etc)... es decir, sin una losa de preocupaciones de lo "básico", pero sobre todo sin ansiedad. El momento en que me di cuenta de que estaba ahí fue ya hace años, pero nunca me había permitido quitarla. Sin preocupaciones ni tener que entrenar para poder tener la beca y que me paguen la carrera, sin tener que estudiar, sin tener recados o trabajos pendientes. Realmente creo que ha sido la primera vez que me he dedicado una mañana a mi mismo estando a gusto con cómo están las cosas. Magnífico...Me siento hasta drogado de felicidad. Alegría que no proviene de las ambiciones ni de perseguir nada, sin objetivos en los que tenga que dedicar tiempos ahora mismo, no hay ninguno; y lo que me viene por delante va a ser lo que más disfrute en la vida.

Hoy ha sido ese día y así quiero recordarlo.

15-VII-22

 Pensando dentro de mi voy a explicar algo que conozco pero jamás he expresado. Por las razones que sean en mi crecimiento me han humillado por mis dolores, limitaciones e incapacidades, sea por ser el pequeño y enfermo de tres hermanos, por ser el hijo enfermo entre tres sanos, por débil y/o menos competente. Todos mis dolores se veían como un lastre para la familia, todas las veces que fui a respirar oxígeno de una bombona eran una limitación para los demás, cada vez que se referían a mi como "enano cabezón de mierda" como broma repetitiva y constantemente a lo largo de los años, quizás para ellos sería un juego divertido, para mi era una manera de asimilarme, de entenderme en un contexto que me dejaba claro cuál era mi papel. 

Entre otras cosas que pudiera decir por lo que significa ahora en mi, veo que eso me ha hecho ignorar mi malestar hasta que sea inaguantable, un límite que he alcanzado casi exclusivamente a nivel mental (muy muy pocas veces a nivel físico). Desobedecer mi cansancio es un reflejo de cómo me han criado, porque daba igual mi sentir, importaba más el lugar y la hora de los demás de mi entorno.

Puede que mi manera de ser duro, sin límite, sin molestar a los demás ni mostrar cansancio ante las largas y duras tiradas sea la la expresión adulta de un niño desatendido, porque importa el objetivo, el fin, y no qué haya que pagar para alcanzarlo.

11 de abril del 22

A punto de terminar la carrera, qué decir. Ponerse un título después del nombre como que he cumplido los requisitos para que la sociedad pueda decir que soy médico, para que yo también pueda decirlo, da igual qué sienta. Luego la gente que no siente como la sociedad dice que ha estudiado medicina, porque ser médico depende de lo que hayas vivido implica muchas otras cosas... Es un embrollo el sentir, se atraganta y al final no es necesario. Si sacara mi ego a relucir usaría esa etiqueta para creerme algo más que nadie, para saber que en la sociedad represento algo importante; la realidad es otra: "a todo el mundo se la sudas así que por lo menos sé tu mismo ya que nadie va a dar nada por ti". 

Nadie es necesario, me digo a mi mismo. Cuando realmente el no necesario soy yo, al no estar en el día a día de nadie. Pero sí hay gente que es necesaria en la vida de otras personas, incluso yo tengo gente en mi vida que considero necesaria, pero no lo soy yo así para nadie. La vida seguirá pase lo que pase, por eso intento seguir mi propio camino, tener algún sueño y luchar por cumplirlo. Habrá merecido la pena todo tiempo invertido y todo esfuerzo, siempre se aprende algo incluso si son golpes.

Ahora pienso en el momento de graduarme, gracias abuela, y me hace recordar a mi madre. Sus sueños por tener hijos que llegasen alto y medrasen en calidad de vida y escala social la verdad que nunca me inspiraron, pero me acuerdo de quien no está, así también me acuerdo de Fran: qué habrás vivido y sentido mi amigo, qué tristeza me alcanza cuando te recuerdo tantos años después.

Tengo mucha gente a la que agradecer. Sigo estando solo para tomar todas las decisiones. Qué difícil durante los últimos tiempos ha sido encontrar amigos como puntos de confianza, paradas en el camino en las que guardar partida, descansar y continuar. Mi manera de disfrutar no es la misma que para la grandísima mayoría de gente, por ello cuando soy yo lo disfruto mucho más, pero eso son los menos de los momentos. Contento por ser más fiel a mi mismo y dejar la presión social de lado, dejar a gente de lado.

Continúo como un autómata en mi rutina de comodidad y aspiraciones, pero el tiempo va siempre a la misma velocidad. Sí es rápido en los momentos que comparto con la persona que más quiero, pero ni está ni espero que esté pronto de la mano a mi lado. Por lo demás cuidarme y apreciar lo que vivo y siento, intentar disfrutar, dar un poco de luz al mundo, aprender...

27-11-21

 La tristeza que ahora mismo me produce verme de niño me hace llorar.

Ver que tantas veces sin entenderlo me describían como "trabajador" en el colegio, en mis notas como alguien que se esforzaba, con cualidades para la música, muy buena capacidad de expresión oral, escrita y corporal, desordenado y con mala caligrafía. Lo he visto ahora recogiendo papeles aireados consecuencia de la vigesimo cuarta mudanza desde el einicio de la universidad.

Quizás me he de aceptar como soy para lo bueno y para lo malo, nada más.

Quizás deba, pero aceptarme incluye reconocer que me desroza por dentro una infancia tan triste, rodeada de violencia ocnstante, agresividad, abusos físicos, emocionales y sexuales. Siempre me pareció sorprendente ver cómo las víctimas apagaban sus gritos internos durante años y años, recientemente lo entendí, y no hay nada que hacer con eso (salvo mi más reciente empresa, dominada por intentar tratarme bien).

Recuerdo a los adultos diciéndome que era "muy guapo, muy bueno y muy listo", y cómo aún hoy sigo sin poder creérmelo...

Los hitos del desarrollo los he vivido con dolor, y me entiendo cuando digo eso, pero explicarlo me llevaría mucho tiempo ahora, en otro momento haré de las palabras escalas armónicas para que ni falte ni sobre nada para que aquél con el comprender trabajado, así ocmo un músico el oído, lo entienda.

Qué triste me hace sentir que no tenía preocupaciones y podía disfrutar de aquello que me rodeaba, ahora no hay música, colores ni calor.

Me da mucha pena ver lo buen niño que fui, cómo me contaminé, cómo luego me contaminaron y eché gasolina a mi salud mental. Podría haber sido tan feliz...

23-11-21

Aquí mientras estudio he pensado que realmente me jode haberme enterado ahora de que PL dijo que yo fui quien la engañó y puse los cuernos y haberme enterado cinco años después sin que nadie antes me lo hubiera dicho. Me recuerda mucho al anterior episodio en el cual dijeron que hasa había levantado la mano a la que era mi pareja, entenrándome yo dos años después (para, aún a día de hoy, considerar a quienes me lo dijeron personas en las que confío).

Los dos son casos diferentes, comprendo, entiendo y comparto que siempre creería a una mujer si me dijera que le han agredido físicamente, y desde mi rol obligado de hombre entre el conjunto de personas no puedo hacer nada. A mi mismo me digo que no lo he hecho, y que haber perdonado 7 años después de ni cruzar miradas me honra pero no es tratarme bien.

No puedo hacer nada con lo que la gente piense o diga de mí, está claro. Tampoco puedo ignorar que hayan mentido en algo tan íntimo y personal.

He perdonado y olvidado a las dos personas que difamaron de mi en el campo de lo íntimo (aquél en el que nadie se quiere meter a sanar, sino que se impulsa por el cotilleo y los prejuicios), y no sé por qué. El rencor no cabe en mi ni lo necesito, hace daño y quema el tiempo. Lo único que me contenta es serme fiel a mi mismo, cumplir mi palabra y actuar de acuerdo a mis ideas, y eso no me lo quitará nadie. 

19-9-21 Domingo

 Me quiero parar ahora en un solo pensamiento.

Mañana empiezo el primer día del último curso del grado en medicina y tengo muchos sentimientos a flor de piel. Lo que implica terminar el grado, de ahí en adelante, y el proceso de año a año haber sacado todo adelante con una pandemia de por medio.

Es tremento el vértigo. Jamás pensé que llegaría hasta aquí, he superado todas mis expectativas aunque llame la atención a mí mismo y a cualquiera que me vea, ¿para qué empezar algo que no ves posible terminar?

Muchas veces además de imposible me consideré incapaz, es un pensamiento muy frecuente.

Y mírame ahora, con más ropa que nunca, en un estudio solo para mí, en una cama de 1,40m con sábanas limpias el día después del último sábado sin preocuparme por el MIR. Hay mucho trabajo de aqúi en adelante, pero tengo unas comodidades que jamás tuve, y voy a darlo todo de mi.

Agradeceré todas las vivencias y coincidencais que me hicieron estar aquí, darme cuenta de lo que es el deseo, afrontar los objetivos, reconducir los pensamientos descarriados. Luchar física y mentalmente me agotó en mayo, tanteé mi límite, fui capaz de soportar una ansiedad que no podía ver hasta que me sobrepasó. Ahora soy más fuerte, estoy más seguro.

Terminaré esta carrera, haré un buen MIR, siendo médico trabajaré, daré todo de mi y lo haré lo mejor que pueda. Quiero seguir queriendo a las personas.

Con todo esto aquí estoy, he conocido gente que me acompañará toda la vida, he visto el valor real de las personas de la misma manera que me empiezo a ver a mi mismo. Seguiré buscando aquellas actividades que cobran sentido por si mismas. El camino de la vida es el camino que hay que seguir.

Abril 21.

 Leyendo el libro Quizás vivir sea esto de J. E.

Con el paso de los años mirando la vida como una escalera más que como el ascenso a una montaña veo cómo mi calidad se ha ido superando a grandes pasos. Claro, decido dónde están los escalones y eso es irreal, la percepción del pasado tan ocndicionada al presente me da un toque de atención. Reformulo entonces.

Como una montaña, donde cada paso puede ser diferente y no tener relación con el anterior más allá de la continuidad de lo físico, en lo espacial, a lo largo del recorrido veo cómo cada vez tuve más capacidades, más herramientas. En el trayecto hubo desde praderas hasta avalanchas.

Sigo sin ver la cima, pues no conozco qué es mi nirvana, y disfruto de la incertidumbre tan controlada del sistema. Me escaparé cuando lo necesite, lo seguiré cuando esté cansado de imaginar. Pero hoy me he dado cuenta de que atraigo a gente buena, la sé reconocer o me esfuerzo por llevarlos dentro de tal manera que se quieran quedar. Debo mucho a tantaos que no me puedo sentir solo. Gracias.

Abril 21. Del mundo a mis adentros

 Envidio la sensación de hogar que tienes permaneciendo en tu casa, en la montaña, demuestra tu fidelidad a ti misma no dejándote arrastrar por la velocidad y los estímulos que te hacen estar constantemente en la ciudad (como los monos con las luces, objetos brillantes y sonidos con timbre regular).

También quiero que mi vida resuene entre un montón de percepciones y sentires que guarde dentro de mi.

He pasado mucho tiempo disponible y atento a la oportunidad de la infomración, como si todos los actos tuvieran que tener alguna trascendencia. Mi buena actitud se correspondía con una necesidad de realización con el reconocimiento correspondiente, y eso también me producía disconfort. Ahora entiendo por qué, y las razones por las que he cargado mi personalidad con tanta información pública. El ego. La vanidad y la inconsciencia pensando que soy algo frente al mundo.

Lo que tengo y lo que soy está dentro de mi, guardado. Lo que soy es para quien comparte por elección su tiempo y su vida conmigo, ese es el criterio. Descubriré dónde está mi armonía y cuál es mi motivo de vivir. Aún estoy descubriendo dónde me encuentro porque sigo anclado a un sistema que capitaliza hasta la manera de mirar.

15-3-21

He borrado las tonterías introductorias que había escrito en las primeras líneas, no venían a cuento. En realidad creo que eran cuestiones que no dependían de mi, me dediqué a resumir los titulares de prensa del día, porque desarrollar algo que existe es mucho más facil que crear. Ver el mundo exterior es mucho más fácil que dar luz a nuestro interior.

Ahora lo que quería contar.

Tengo una nota porque me sentí así pero en su momento no me dio la vida para escribirlo: Escribir texto blog estoy atrasado y quiero ser mayor -más bien hacer cosas de mayor y dejar de estar anclado aquí-.

Entiendo que cada momento de la vida tiene sus circunstancias, y hay que aceptarlas o cambiarlas por otras. Reconozco que la decisión de estudiar medicina en su momento la tomé desconociendo y dejando de pensar en el futuro. No solo en mi futuro sino en el futuro de lo que es mi entorno. Se me pasan tantas circunstancias por la cabeza que me resultaría difícil expresarlo todo, pero vamos a ir viendo.

Ayer comiendo y post comiendo con Sara y Mel, en su casa, dije que nos habían (a mis hermanos y a mi) educado como Moglis (Mowgli). Eso quería decir que no nos enseñaron cómo se construyen las relaciones sociales, los objetivos, el control, el frenar y el empujar por algo. Nuestra referencia del mundo en la sociedad está determinada sin ningún tipo de apoyo ni ánimo (pues la paternalidad supone el contacto de un infante -como tabula rasa- con el mundo cultural y las relaciones interpersonales -como podría ser cualquier libro de Homero-). Dentro de estas circunstancias mis hermanos han aprendido en casa de sus amigos a sobrellevar los distintos sentimientos, la manera de entender a los demás, y yo he hecho lo propio. Renuncio a considerarme egoísta por hablar tanto de mi en mi blog, pues es una característica que tengo y repudio a la vez que intento corregirla. Si a un animal social le quitas la sociedad, pues queda un animal sin más (que no es poco), pero con capacidad de aprender.

Me reconozco inestable, pero parece que sí soy trabajador, tengo tenacidad y capacidad para esforzarme un gran número de horas en diferentes temas. Poder decir esto es algo nuevo para mi (pese a que haya gente que me conoce realmente más que yo a mi mismo) porque es una deducción alcanzada a partir de mi situación en comparación a otras personas (pues estoy con una carrera en la uni, sigo haciendo deporte pese a todo lo que me limita y los quebraderos de cabeza consecuentes).

Creo que esta necesidad de expresarme viene de que a veces no sé cómo interactuar socialmente. Es decir, sí sé qué hay que decir, qué temas hay que tocar y no tocar, cómo hacer reír, cómo llamar y no llamar la atención, hacer que se sientan a gusto o buscar simplicidad o rechazo. Mi problema es que no sé cómo sentirme relacionando socialmente.

Grandes cosas he conseguido a través del aprendizaje mediante películas, series, observar a los demás interactuar, escuchar los dramones de la adolescencia y postadolescencia (que no eran solamente noviazgos). Ese aprendizaje fue, muchas veces sin sentimientos. Se me ocurre una manera de expresarlo. Esto no es siempre así, quizá estoy exagerando mucho la circunstancia, y se da en determinadas situaciones que razono a posteriori, los momentos puntuales en que carezco de herramientas para sobrellevar la situación.

Pongamos que eres un pirata y estás en un juego de ordenador viejo, ese juego tiene un desarrollo mediado a través de diálogos, objetos, escenarios y circunstancias. Cuando abres el diálogo, te dan dos opciones para hablar con esa persona; imagina que una dice "Hola buenos días querría un póster para mi barco" al entrar en una tienda de piratas, y la otra dice "Quiero ese póster, el más barato, adiós". Pues eso son herramientas, frases sin sentimientos porque no las has escogido, pero serías capaz de interactuar en ese juego, te relacionas, evolucionas y pasas las misiones o lo que sea que te hayas imaginado de ese juego. Ya termina ese ejemplo.

Me considero atado a mis herramientas, dejo que pocas cosas me lleven por los sentimientos. De ahí, por ejemplo, se ve muy bien mis fracasos amorosos, por no saber gestionar aquello que me destripa y por lo que me desvivo. Una relación afectiva no se puede llevar con diálogos cerrados, ni con herramientas ni con esquemas. Hay que sentirlo.

Nunca me enseñaron qué era el amor en la expresión familiar, creo que nunca vi un cariño sin intención de otra cuestión (comprensible desde el punto de vista de un divorcio a edad muy temprana), y de los payaros de la cabeza del mi padre ya hablé alguna vez, no es el tema de conversación y últimamente ya decidí cuál sería mi postura respecto a ese hombre (que tiene relación con el sentir, el amor y decidir por lo que me salga de dentro y no por lo aprendido).

Mi maduración carece de estímulos amorosos que yo supiera interpretar (y por ello me han atropellado mis propias ideas). Ahora voy a poner una frase que encontré en el libro que me dejó Sofía. "Un sistema de parentesco es una imposición de fines sociales sobre una parte del mundo natural" Gayle Rubin.

Por saltar divagaciones mentales. Quiero crecer, y considero que estaré anclado a mi familia por obligación, por dependencia hasta que trabaje de mediquín allá donde esté, mi independencia económica hará florecer otra parte de mi, seguro. Otra cuestión relacionada es mi educación con el dinero como bien de acumule y privación, pues como privilegio de obtenerlo no se debe usar por si pasara cualquier cosa -> la cultura de ser el más muerto del cementerio. Qué horrible, en fin.

Me encuentro mejor después de haber podido expresarlo :)

20 julio 20

 Me desperté de un sueño que me daba mucho miedo, ha hecho que el tiempo pase a otra realidad. Recuerdo que estaba durmiendo a solas y busqué poner basura encima de mis problemas para no verlos, no verlos por ahora para poder al antes: no funcionó.

Ahora no sé qué pensar y lo escribo. Es un buen recurso que he utilizado mucho, en muy malos momentos. Es un buen recurso que siento como abandonarme, hace que pasen muchos días y muchas cosas hasta que pueda volver al día a día en vez de caminar debajo del rumbo de la única nube que llora lluvia. En letras, en un mensaje, haré que estas palabras estén siempre asociadas a esta sensación que no quiero repetir: aquí encierro un "estoy mal" que nunca me sale decir a cualquiera que se interese por mi. Así me entiendo aunque no sea lo más eficiente, es lo que soy. Se me puede entender y yo me entiendo, lamentablemente nunca se dio ese conjunto de tiempo y ganas para ser una unidad con nadie, tampoco me preocupa pues he primero de ser uno conmigo.